Diez consejos para limpiar frutas y verduras y evitar intoxicaciones
Librarse de las bacterias es fundamental a la hora de consumir alimentos crudos.
Millones de personas se intoxican cada año por ingerir comida contaminada con gérmenes. Según datos de la FDA, Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos, en este país son 48 millones los afectados anualmente.
“Aunque muchas personas saben que los productos animales deben manipularse cuidadosamente para evitar que se echen a perder, muchos desconocen que las frutas y las verduras también pueden ocasionar brotes de enfermedades transmitidas por alimentos”, advierte el organismo, que da una serie de pautas para la limpieza de frutas y verduras.
Millones de personas se intoxican cada año por ingerir comida contaminada con gérmenes. Según datos de la FDA, Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos, en este país son 48 millones los afectados anualmente.
“Aunque muchas personas saben que los productos animales deben manipularse cuidadosamente para evitar que se echen a perder, muchos desconocen que las frutas y las verduras también pueden ocasionar brotes de enfermedades transmitidas por alimentos”, advierte el organismo, que da una serie de pautas para la limpieza de frutas y verduras.
10 CONSEJOS para limpiar frutas y verduras:
1. Debes escoger productos que no estén golpeados o dañados y asegurarte que los productos precortados, tales como bolsas de lechuga o tajadas de sandía, estén refrigerados o almacenados con hielo en la tienda y en el hogar.
2. Lávate la manos durante 20 segundos con agua tibia y jabón antes y después de preparar alimentos frescos.
3. Desecha toda parte dañada o golpeada antes de preparar y comer.
4. Frota suavemente los alimentos mientras los enjuagas bajo un chorro de agua.
5. Lava los productos frescos antes de pelarlos de manera que la suciedad y la bacteria no se transfieran del cuchillo a la fruta o el vegetal.
6. Usa una escobilla para limpiar las frutas y verduras duras tales como melones o pepinos.
7. Seca las frutas y verduras con una toalla de tela o de papel para reducir la bacteria que aún esté presente.
8. Desecha las hojas externas y que estén dañadas de las verduras de hoja.
9. Almacena los productos frescos dentro del refrigerador a 4 grados o menos.
10. Ya que la cocción de alimentos elimina las bacterias dañinas, las frutas y las verduras crudas son las que acarrean mayor riesgo de contaminación. Se puede evitar la toxinfección alimentaria evitando alimentos crudos que generen dudas o no parezcan estar en buen estado o bien conservados.